Para las policías chavistas, perseguir mineros de Bitcoin es más importante que atacar a la delincuencia común. Las fuerzas de seguridad actúan incluso fuera de los parámetros de las propias leyes aprobadas por el régimen para regular esa actividad.
Por Primer Informe
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La finalidad de tal persecución parece ser el decomiso de los equipos empleados para la minería de Bitcoin. Los últimos movimientos del régimen de Nicolás Maduro apuntan a la centralización de la actividad minera de criptomonedas.
Al mismo tiempo, la dictadura ha sentado ya las bases para crear un monopolio de la actividad que quedaría en mano de los militares adeptos al régimen.
Persecución sin cuartel
Pero primero se necesita eliminar todo vestigio de minería libre de las criptomonedas. El portal BeInCrypto, reportó el caso de un minero de Bitcoin detenido los primeros días de enero. El arresto lo realizó la Policía del estado de Carabobo, en el centro del país.
El ciudadanos, un hombre de 53 años, fue apresado bajo cargos de “delitos informáticos”. Y le incautaron 37 equipos de minería ASIC.
En Venezuela existen claras regulaciones para la minería de criptomonedas dentro de Venezuela. Pero eso no ha detenido la persecución a quienes se dedican a esta actividad siguen sucediendo.
El relato de la detención que dan los funcionarios policiales revela los vacíos que siguen existiendo para la actividad. Los efectivos de seguridad supuestamente notaron una actitud sospechosa de una persona.
Luego de seguirla la ubicaron en un lugar en donde había «37 máquinas de las reconocidas Bitcoin encendidas sin permisología».
La policía incautó esos equipos y también un automóvil y una unidad de procesamiento central (CPU), que serían propiedad del detenido.
Fuera de la ley
Pero todo el procedimiento, apunta el portal BeInCrypto, está fuera de la normativa dedicada a la minería de criptoactivos.
De acuerdo con las leyes vigentes para el chavismo, solo la Superintendencia Nacional de Criptoactivos y Actividades Conexas (SUNACRIP) puede hacer ese tipo de inspecciones.
Además, los procedimientos que deben ir acompañados de un acta en donde se deberá detallar cuales fueron sus acciones en la inspección.
Asimismo solo la SUNACRIP puede tomar medidas de descomposición de los equipos y suspensión de permisos o autorizaciones.
La privativa de libertad o detención de los mineros no está contemplada en esa norma. Así mismo, se determina que los equipos decomisados estarán en custodia de la SUNACRIP. Pero la policía, empeñada en perseguir mineros de Bitcoin, no observa tales parámetros.
Es decir, se trató de un procedimiento fuera de la ley.
Con información de BeInCrypto.
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